ALTA ROTACION Y TEMPORALIDAD EN EL MERCADO DE TRABAJO

La Secretaría de Protección Social y Políticas Públicas de Comisiones Obreras ha elaborado un informe en el que denuncia la "alta temporalidad" en la contratación y la "excesiva" rotación en la sanidad pública.

En concreto, el informe señala que la sanidad pública, con una tasa de temporalidad del 31,6 por ciento, supera la media general así como la registrada en la sanidad privada o en el conjunto de los sectores públicos no sanitarios.

Además, 193.000 personas trabajan con contratos temporales, una cifra que ha crecido tanto en términos absolutos como relativos desde 1999 como consecuencia de la necesidad de expansión del sistema sanitario público por el incremento de la demanda y los límites tanto a la reposición de efectivos como a la generación de nuevo empleo.

La mayor parte de esta elevada temporalidad se concentra en el número de plazas estructurales ocupadas de forma interina. De hecho, según el sindicato, el 54 por ciento de los temporales trabajan como interinos en los servicios de salud. Sobre el conjunto del empleo, suponen el 17 por ciento del total de profesionales en la sanidad pública.

TEMPORALIDAD DUAL

Del mismo modo, el trabajo de CCOO ha puesto de manifiesto que la temporalidad en este ámbito es dual y, junto a estas interinidades prolongadas, hay una bolsa de temporalidad en la que los profesionales se ven sometidos a una excesiva rotación. Así, más de 12.000 personas, realizaron más de doce contratos en un solo año, llegando algunas a un pico máximo de 154 contratos en un solo año para trabajar 263 días en 2014, "más que cualquier otro estatutario con una plaza consolidada".

El tercer aspecto que se resalta en el informe es que hay una "excesiva antigüedad" en la temporalidad, puesto que el 65 por ciento lleva más de tres años trabajando como temporal, y casi un tercio más de diez años. Una antigüedad que se produce tanto en los interinos como entre el resto de temporales.

Para corregir esta situación, el sindicato propone actuar en el campo normativo removiendo los límites a la reposición de efectivos y la generación de nuevo empleo; promoviendo una convocatoria extraordinaria; modificar los actuales Estatutos; y cumpliendo las previsiones para definir las plazas como estructurales.

Finalmente, aconseja en el ámbito de la negociación colectiva, no sólo prever necesidades y recursos sino también promover otro modelo de relaciones laborales diferente al imperante en la mayor parte del SNS; y promocionar medidas que permitan una mayor calidad en el empleo eventual, racionalizando la actual rotación laboral.