El gigante Coca-Cola se propuso hace una década un objetivo:
devolver a la naturaleza el equivalente al agua que utilizan para sus
productos. Era un reto considerable y por ello se pusieron de plazo hasta 2020
para conseguirlo. La iniciativa sostenible ha tenido tal éxito que en el año
2015 ya habían devuelto unos 191.900.000 litros de agua, el equivalente al 115%
del agua que gastó en 2016 para sus bebidas.
Para llevar a cabo su objetivo cuentan con proyectos
comunitarios de agua en 71 países. Sólo en Latino América y América Central,
con el programa ‘Agua por el futuro’ y otras iniciativas, ya se han devuelto
6.691.700 metros cúbicos de agua, lo que supone el 100% del agua utilizada para
desarrollar los productos de Coca-Cola aquí. Por cada gota que emplean,
devuelven otra.
El proyecto sostenible es impulsado por el Sistema
Coca-Cola, la Alianza latinoamericana de Fondos de Agua y The Nature
Conservancy (TNC), con la visión compartida de preservar y restaurar la salud
de las cuencas hídricas. Así buscan reabastecer a la naturaleza y a las
comunidades el agua con un doble fin: mitigar los riesgos como la escasez y
contribuir con la disponibilidad de este preciado recurso para el futuro.
Hasta ahora han logrado unas 6.000 hectáreas de cobertura en
9 países con 28 proyectos diferentes. Unas cifras que van en aumento mientras
en la compañía siguen trabajando para utilizar menos agua en sus bebidas. En
2004 necesitaban 2,7 litros para elaborar un litro de producto final, en 2015
pasaron a 1,98 y el objetivo es que en 2020 sea solo 1,7, un 27% menos.
Dos millones de personas obtuvieron acceso sostenible a agua
potable en África a través de la iniciativa en la que colabora Coca-Cola y en
20 países han logrado restaurar 187.000 hectáreas de bosques con especies
nativas y conservadas.
Iniciativas de Coca-Cola en España
En España, Coca-Cola mantiene activos seis proyectos
medioambientales en Barcelona, Málaga, Valencia, Castellón, Ciudad Real y
Teruel de diversa índole. Quieren devolver el agua que consume a la naturaleza
y ayudar en la restauración de humedales. Para esto último plantan miles de árboles,
trabajan en la monitorización de aguas subterráneas y el desarrollo de
tecnologías para un uso eficiente de agua.
Can Fenosa, que se lleva a cabo junto a la fábrica de
Coca-Cola en Martorelles, al norte de Barcelona, es uno de esos proyectos que permitió
a la compañía “reforzar” su “compromiso con la protección del medio ambiente”,
según explicó la gerente de Medio Ambiente de Coca-Cola European Partners,
Marta Font.
Entre las cifras que la compañía destaca está la aportación
de 58,3 millones de litros a la naturaleza entre los años 2010 y 2016, la
creación de una laguna artificial que conecta con el entorno fluvial o la
plantación de casi 11.300 árboles y arbustos que representan a los tres
ecosistemas de la zona.
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