La inflación se disparó en mayo
al 2,1%, un punto más que el mes anterior (1,1%), en gran parte por la subida
de los carburantes, según el dato del Índice de Precios de Consumo (IPC) que
elabora el INE. La cifra es una décima superior al 2% que había adelantado la
oficina estadística.
La subida de precios ha sido
generalizada en los grandes grupos, con influencia de los carburantes y el
calentamiento de precios por la llegada de la temporada turística. Ha impactado
el alza del 5,1% en transporte, por la subida de los costes de carburantes y
cierto incremento en el precio de los billetes de avión; el avance del 2,3% en
vivienda, por una electricidad más cara; del grupo ocio y cultura, del 0,8%,
por los precios de los paquetes turísticos; la subida del 2% de alimentos y
bebidas; y de otro 2% en hoteles, cafés y restaurantes.
Sólo hay bajadas en el grupo de
comunicaciones, por la bajada de los precios en los servicios de telefonía, por
la guerra para captar clientes de las compañías.
Mes sobre mes, mayo sobre abril,
el avance fue del 0,9%. Lo que más subió en mayo fue la fruta, el 8%. Le siguió
la electricidad, con el 6,4%; transporte aéreo, con el 5,8%; y combustibles,
con el 5,2%. Por contra, el pescado y marisco fue lo que más se abarató, el 1%.
Castilla-La Mancha y Catalunya,
donde más crecen los precios
Por autonomías, Castilla-La
Mancha es donde más suben los precios, el 2,4% interanual. Detrás viene
Catalunya, con el 2,3%, y un grupo que se pone en el 2,1% (Aragón, Balears,
Cantabria, Castilla y León, Comunitat Valenciana y Navarra). En Madrid subieron
el 2%.
El dato supone la cifra más alta
desde abril de 2017 y encadenar 21 meses seguidos con subidas interanuales de
los precios, una referencia que siguen de cerca los asalariados y pensionistas
para no perder poder adquisitivo.
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